Culturalgeek

Reseña geek: Los cartoon del 2010, una época llena de referentes

reseña cartoon
En agosto de 2023, se estrenó en Netflix “Hora de Aventura: Fionna and Cake”, un spin-off del cartoon clásico “Hora de Aventura”.

Este nuevo dibujo animado es obra de Pendleton Ward, la mente detrás de “Bravest Warriors” (2012) y “The Midnight Gospel” (2020), series con una animación que podría considerarse infantil. Sin embargo, al igual que las aventuras de Finn el humano, y Jake el perro, abordan temas que esconden reflexiones destinadas a un público adolescente y, por qué no decirlo, adulto. Sin embargo, esta no fue nunca la intención original de Ward, quien solo buscaba animar a los niños a imaginar mundos llenos de aventuras en un contexto donde ya comenzaban a verse las consecuencias de un mundo hiperdigitalizado.

Tomando como inspiración a “Calabozos y Dragones”, juego que también inspira el nombre de este programa, el autor quería alejarse de los típicos estereotipos acerca del heroísmo, el bien y el mal, la doncella en apuros, entre otros. Así fue que casi sin quererlo, con “Hora de Aventura” comenzó a desarrollar una serie animada o cartoon con un universo increíblemente rico en su construcción y con personajes redondos alejados de la simpleza a la que muchas series de la época nos tenían acostumbrados.

Poco antes de la revolución que significó este cartoon, se estrenaron dos series que, a pesar de no ser exitosas, marcarían el tono humorístico y artístico de sus sucesoras; “Chowder” (2007) y “Las maravillosas desventuras de Flapjack” (2008). En esta última, el mismo Pendleton Ward colaboraría como animador de storyboards, junto a otro que más adelante tendría éxito, Alex Hirch. Todo esto (entre otras decisiones creativas) daría paso a una de las eras de la animación más exitosas; la “Check It Era”, que allanaría el camino a series como “El maravilloso mundo de Gumball”, “Escandalosos”, “Tío Granpa” y algunas de las que quiero hablar un poco más en profundidad.

“Un Show Más” se estrena en 2010 bajo la autoría de G. J. Quintel, quien además le da la voz a uno de los protagonistas, el azulejo Mordecai quien hace su mejor esfuerzo por no dejarse influenciar por Rigby, un mapache inescrupuloso e irresponsable que no ha sido capaz de dejar de ser adolescente, el primer mapache milenial de la televisión.

Ambos trabajan como cuidadores de un parque, frustrados por todas sus decisiones, no han podido alcanzar la adultez o lo que socialmente se espera de un adulto; viven de allegados, son aficionados a los videojuegos, a la comida chatarra y les son difíciles las relaciones sociales, así como la toma de decisiones.

Actividades tan triviales como decidir quién es el jugador uno y quien el dos, concluye en una batalla mortal de golpes, o acompañar a tu jefe a carretear y terminar en un viaje psicodélico por comer muchas alitas picantes al ritmo de “Mississipi Queen”. Este es el tono que define a “Un Show Más” en la mayoría de sus episodios, con personajes que van adquiriendo capas de profundidad a medida que los eventos se desarrollan.

Quintel fue capaz de realizar una radiografía aguda a los tiempos que corren en una serie para niños.  Mordecai y Rigby catalizan perfectamente todas esas metas y frustraciones a las que algunos nos vemos enfrentados cuando no somos capaces de dejar atrás nuestros sueños de infancia, y preferimos imaginar escenarios ficticios alejados de la rutina y lo mundano de ser “corriente”.

Otra serie que merece su propio espacio en esta reseña es “Steven Universe”. Creada por Rebbeca Sugar, nos pone en la piel de Steven, un preadolescente risueño e ingenuo que vive con su padre y 3 guardianas conocidas como las gemas de cristal; Perla, Amatista y Garnet protegen al joven y los secretos que su madre Rose Cuarzo dejó en la tierra.

Con un enfoque menos absurdo y tintes de comedia romántica, “Steven Universe” consiguió una increíble base de fans que especulaban y teorizaban respecto de las pistas y desarrollo de personajes que la autora decidía dejar en cada episodio. A medida que los eventos avanzan, las diferencias entre el bien y el mal se desdibujan para dar paso a unos tonos grises y giros inesperados. Un mundo lleno de secretos, mentiras y misterios hacen de esta animación una de las más sólidas en cuanto a la construcción de universo y una de las primeras en tratar temas como la diversidad con altura de miras.

Unos años más tarde, “Clarence” no tuvo el mismo impacto que las anteriores, pero logro calar hondo en quienes la recuerdan con cariño, yo incluido. Con solo 3 temporadas debido a actitudes reprochables por parte de su creador Skyler Page a sus compañeras de trabajo, la serie se ambienta en los 90 y nos muestran las aventuras de Clarence, un niño alegre, confiado y dulce que se la pasa con sus dos mejores amigos, Sumo y Jeff. El primero inquieto y caótico, el segundo, metódico y quisquilloso.

Acá no contamos con un gran desarrollo en la trama ni en los personajes, pero puedo destacar el cariño que la serie muestra por la inocencia e imaginación de los niños, así como por el ambiente familiar, la escuela y un mundo menos digitalizado.

A pesar de la sencillez intencional de la serie, hay momentos de introspección que la convierten en una de mis favoritas. El episodio “El Bote Soñado”, se centra en Sumo y su preocupación por el futuro; frente a la incapacidad de contestar dos preguntas. ¿Qué es lo que más quiero en la vida? y ¿de qué te arrepientes? No puede evitar sentirse frustrado.

En su casa no le prestan atención, y a sus amigos parece no importarles su crisis existencial. Sumo convence a su papá de que puede construir un bote él solo. Después de muchos intentos y al borde del colapso, un error tan simple como un clavo chueco lo hacen explotar y destruir todo lo que había logrado, cuando llegan Clarence y Jeff para ayudarlo. Sumo, al ver el legítimo interés de sus amigos, acepta colaborar en una tarea que estaba obsesionado con terminar solo. Juntos logran construir un bote muy simple que navega, y por fin puede responder a la pregunta:

¿Qué es lo que más quiero en esta vida? Un bote, pero no cualquier bote, uno que él haya construido. Sumo no es el más inteligente ni el más capaz, pero ahora tiene un bote y es lo que más lo llena de orgullo.

cartoon

Otras cadenas de TV también optaron por trabajos de autores donde la toma de decisiones creativas no tenía tantas trabas por parte de productores. En Disney Channel se estrenan cartoons como “Gravity Falls” (2012) de Hirch, y años antes “Phineas y Ferb” (2007), una de las más populares.

cartoon

Al mismo tiempo, las plataforamas de streaming empezaban a gozar de popularidad y Netflix comienza a producir series, entre las que se encuentra “Bojack Horseman”. Un drama con grandes dosis de comedia negra que plantea algunos de los temas más controvertidos que se han tocado en animaciones. Adult Swim estrena “Rick y Morty”, un scy-Fy animado para adultos que, tras el absurdo, oculta temas como la depresión, ansiedad, consumo de drogas y el sentido de la vida.

Me gustaría terminar esta reseña recomendandoles un episodio de “Hora de Aventura” que contó con la participación de un animador especial; Masaaki Yuasa, director de animé que pudo utilizar incluso su estudio de animación. Titulado “Cadena Alimenticia”, es el séptimo capítulo de la sexta temporada que tiene un estilo muy distinto al de toda la serie, derrochando originalidad y control creativo rozando la experimentación; Finn y Jake son parte de una exposición para niños dada por la Dulce Princesa sobre la cadena alimenticia.

Finn no entiende cómo puede haber especies que coman plantas o gusanos y Jake trata de explicarle el ciclo de la vida y como éste se mantiene en equilibrio. Si bien el episodio no tiene una narración excepcional, el estilo de animación es diferente a todo lo que la serie nos tiene acostumbrados. Colores saturados, una menor cantidad de fotogramas, escenarios y personajes como salidos de un viaje psicodélico y encuadres poco usuales en un cartoon son recursos que destacan en este episodio.

Para finalizar, quiero dejarlos invitados a revisar “Tres Puntos Media”. Noticias de actualidad tanto nacional como local. Uno de los medios con mayor relevancia en Peñalolén y alrededores. No se pierdan el programa “Calabozos y Weones”, donde abordaremos la cultura geek desde distintos puntos de vista; series, cine, videojuegos y más. Recién se estrena en Spotify en formato podcast y podrás escucharlo cada miércoles de 17 a 19 horas, también nos podrás encontrar en Instagram donde subiremos extractos de los mejores momentos. Muchas gracias por llegar hasta acá y nos leemos pronto.

Instagram Calabozos y weones: www.instagram.com/calabozos_y_w/

Instagram Tres Puntos: www.instagram.com/radiotrespuntos.cl/